. Festival del Swinger

Esta es mi primer participación en dicho Festival; iguanito me dejo entrar a su blog y me dio un hospedaje de primera , se le agradece mucho sobre todo la hermosa presentación que hizo de mi.

En esta ocasión me toca darle hospedaje a :

 Amorphis  que es un poco de casi todo lo que escribe...

Molino Rojo

Encendí el polvoso ventilador de techo de mi habitación, abrí las ventanas para permitir la entrada del aún caliente aire nocturno, coloqué mi laptop sobre las cajas de madera que pretendían hacerse pasar por buró, de la mochila saqué la película Moulin Rouge y la puse en el dvd de la portátil. Apagué la luz para quedar únicamente iluminados por el brillo del pequeño monitor de 15 pulgadas, me recosté sobre la cama cubierta por un par de delgadas sábanas que siempre terminaban en algún rincón por el sofocante calor, recargué mi espalda en la inexistente cabecera y te pedí que te acercaras, te recostaste a mi lado recargándote sobre mi pecho, te rodeé con mis brazos, sentí el aroma de tu cuerpo, de perfume combinado con el sudor que tu piel emanó durante el día, y te abracé más fuerte.

La película comenzó así como mis caricias que ya recorrían tu divina feminidad, el ruido del ventilador alborotando el aire caliente y las continuas canciones de la película amenizaron nuestro primer encuentro de la noche, tuvimos que retroceder el video pues entre el prólogo y los segundos diálogos tuvo lugar nuestro propio clímax al hacer el amor. Disfrutábamos más nuestra compañía que la musical película donde la traición rondaba los escenarios y la muerte sería la causa de la inevitable separación de aquellos dos enamorados. Tu piel se sentía suave, ligeramente empañada, y besé tu cuello, y te apreté hacia mi pecho, desbordamos nuevos besos y otra vez frente al complicado amor entre Satine y Christian, nos entregamos nuevamente a nuestros deseos.

Recostados sobre las arrugadas sabanas de la pequeña cama, disfrutábamos de esa noche de cine pausado, la canción Come What May era interpretada por nuestros discretos testigos en el video, repentinamente todo parecía ideal y pensé no solo en ese momento, sabía que tú eras especial y ahí lo confirmé, no solo es tu cuerpo, tus lindos ojos o tu suave boca que me enloquece con esos gloriosos besos, eres tú y tus volátiles sentimientos, son tus inseguros deseos, tus inquietantes reflejos de alegría, simplemente tú, no importan los improvisados muebles reciclados o ese closet sin puertas que deja ver mis sucios zapatos mal acomodados, no importa el tamaño del monitor, o la falta de sonido de cinco canales para ambientar la película, la felicidad está en tocar tus manos, en la simplicidad de tu sonrisa y la complicidad de tu mirada, en compartir contigo el más mínimo detalle y saber que al final del día cerraré mis ojos acompañados del roce de tus labios para amanecer con los primeros rayos del sol y saber que estarás ahí, a mi lado. Al cabo de un buen rato, terminamos de ver la película...